”Es tanto el peso de mi alma que ningún pensamiento puede transportarla, y no hay alas capaces de elevarla a lo inmaterial. Si se conmueve, parece acariciar el suelo con sus alas, como el vuelo bajo de los pájaros cuando presienten la tormenta. En mi pecho anida una opresión, un temor que adivina un terremoto”.

OLVIDADORES

No olvidadizos sino olvidadores

he aquí que también llegan
entre otras herrumbradas circunstancias
la degeneración / las taras del olvido
la falsa amnesia de los despiadados

es ilusión de estos olvidadores
que los otros las otras los otritos
no sigan recordando su vileza
pero son fantasías sin futuro ni magia

si la sangre de ayer alcanzó a macbeth
cómo no va a alcanzar a estos verdugos
de pacotilla y pesadilla

perdí la compasión en el casino
por eso les auguro y les propongo
insomnios con plañidos puteadas mutismos
cuerpos yertos desnudos nunca más seductores
ojos empecindamente abiertos con miradas capaces
de taladrar cerebros y corazón

no olvidadizos sino olvidadores

ocurre que el pasado es siempre una morada
pero no existe olvido capaz de demolerla

13 sept 2010

Yo he vivido largo tiempo bajo amplios pórticos
Que los soles marinos teñían con mil fuegos,
Y que sus grandes pilares, erectos y majestuosos,
Hacían que en la noche, parecieran grutas basálticas.

Las olas, arrollando las imágenes de los cielos,
Mezclaban de manera solemne y mística
Los omnipotentes acordes de su rica música
A los colores del poniente reflejados por mis ojos.

Fue allí donde viví durante las voluptuosas calmas,
En medio del azur, de las ondas, de los esplendores
Y de los esclavos desnudos, impregnados de olores,

Que me refrescaban la frente con las palmas,
Y cuyo único afán era profundizar
El secreto doloroso que me hacía languidecer.

7 sept 2010

NO ESTAS

No estás en la voz del viento, ni en la dispersión de las montañas,
no estás en la flor, y si las aves llaman, no te llaman a ti,
no estás en la desnudez de la tierra, ni en el grave aroma de la hierba,
y si plantas flores para que te brinden su perfume, se lo brindan a sí mismas,
y si construyes un camino, el camino te hablará de sí,
y si construyes tu hogar y lo llenas de objetos preciosos,
un día te recibirá como a una extraño
y los objetos se hablarán a sí mismos en su lenguaje,
burlón para ti.
Es mentira que el manantial existe para apagar tu sed
y el río para que te bañe en su fresco regazo.
Es mentira que las cosas te consolarán con un calmo recuerdo
porque un día se te rebelará todo.

Un día las cosas cambiarán de nombre,
aquel día será odio la piedra, el viento horror,
el camino será pavor, las aves te clavarán en la frente
los clavos ardientes de sus voces, el río será desesperación,
tus objetos serán tu culpa y tus acusadores.
El mundo se habrá derrumbado. El mundo no tendrá nombre.
Entonces deberá serte indiferente. Estarás sentado en un rincón abandonado.

Cerrarás los ojos para no ver nada. Ante todo para no ver
tu propio extravío en el extravío del mundo extinguido.
Para no pensar que tienes
que hacer algo, que tienes que ir a algún lado con tus piernas
que serán delgadas como patas de una araña zancuda.
Sólo tu cabeza será grande. Tu cabeza, que florecerá
blanca como una magnolia. Largamente buscarás en la blanca
cueva de tu boca un nombre para ti,
pero será mejor si ese día encuentras un nombre para el fin
más que para la continuación.

6 sept 2010

ESTA MAÑANA IMAGINE MI MUERTE

Esta mañana imaginé mi muerte
despeñado en el coche o de un balazo.
Me tuve lástima. Lloré por mi cadáver un buen rato.
Hablé luego de vacas, del gobierno,
de lo caro que está la vida,
y me sentí mejor, un poco bueno-
Iba a decirte que estoy realmente enfermo.
Como sin piel, herido por el aire,
herido por el sol, las palabras, los sueños.
Se me ha trepado en la nuca un cabron diablo
y no me deja quieto.
Ulcerado, podrido, hay que vivir
a rastras, a gatas apenas, como puedo.
El mediodía en la calle, atropellando ángeles,
violento, desgarbado;
gentes envenenadas lentamente
por el trabajo, el aire, los motores;
árboles empeñados en recoger su sombra,
ríos domesticados, panteones y jardines
transmitiendo programas musicales.
¿Cuál hormiga soy yo de estas que piso?
¿qué palabras en vuelo me levantan?

«Lo mejor de la escuela es el recreo»,
dice Judit, y pienso:
¿cuándo la vida me dará un recreo?
¡Carajo! Estoy cansado. Necesito
morirme siquiera una semana.

MI CAMA ES DE MADERA

Mi cama es de madera
Y cruje bajo el peso del amor jadeante,
Pero mi cama es un barco inmóvil
que me lleva a donde quiero ir.
Carga mi soledad mejor que yo mismo
y conoce mis sueños
y se compadece de mí.
Mi cama es casi una nube,
es una alfombra para las pisadas de mi corazón.
A media luzo o a obscuras,
en mi cama encuentro a mi mujer, mis hijos, mis libros,
mis recuerdos y mis cigarros.
Y encuentro a Dios, a veces,
en la uz de una tarde como ésta.
que besa con la yema de sus dedos los párpados cerrados.

Amo a mi cama porque en ella reposo como en mi muerte
y en ella siento que la vida puede ganarse aún.

Estoy agradecido porque tengo una cama
y es lo mismo que si tueviera un río,
lo mismo.

IGUAL QUE LA NOCHE

IGUAL QUE LA NOCHE de la embriaguez,
igual fue la vida.
que hice?, que tengo entre las manos?
solo desear, desear, desear,
ir detas de los sueños
igual que un perro ciego ladrandole a los ruidos.

TU CUERPO ESTA A MI LADO

Tu cuerpo está a mi lado
fácil, dulce, callado.
Tu cabeza en mi pecho se arrepiente
con los ojos cerrados
y yo te miro y fumo
y acaricio tu pelo enamorado.
Esta mortal ternura con que callo
te está abrazando a ti mientras yo tengo
inmóviles mis brazos.
Miro mi cuerpo, el muslo
en que descansa tu cansancio,
tu blando seno oculto y apretado
y el bajo y suave respirar de tu vientre
sin mis labios.
Te digo a media voz
cosas que invento a cada rato
y me pongo de veras triste y solo
y te beso como si fueras tu retrato.
Tú, sin hablar, me miras
y te aprietas a mí y haces tu llanto
sin lágrimas, sin ojos, sin espanto.
Y yo vuelvo a fumar, mientras las cosas
se ponen a escuchar lo que no hablamos.

SOY MI CUERPO

Soy mi cuerpo. Y mi cuerpo está triste, está cansado. Me dispongo a dormir una semana, un mes; no me hablen.

Que cuando abra los ojos hayan crecido los niños y todas las cosas sonrían.

Quiero dejar de pisar con los pies desnudos el frío. Échenme encima todo lo que tenga calor, las sábanas, las mantas, algunos papeles y recuerdos, y cierren todas las puertas para que no se vaya mi soledad.

Quiero dormir un mes, un año, dormirme. Y si hablo dormido no me hagan caso, si digo algún nombre, si me quejo. Quiero que hagan de cuenta que estoy enterrado, y que ustedes no pueden hacer nada hasta el día de la resurrección.

Ahora quiero dormir un año, nada más dormir.

mother, father pleace come back home...

Datos personales